EL SALTO
El 85% de la población en España vive en tan solo un 20% del territorio y, a pesar de que el medio rural abarca el 90% de la superficie, solo el 20% de la población reside en este. Y bajando. Una tendencia que, si bien no es comparable a los acusado picos de despoblamiento sufridos en los años 60 y 70, tampoco se revierte.
Si miramos las cifras del último lustro relativas a las llamadas áreas escasamente pobladas —con una densidad inferior a 12,5 habitantes por km2—, el número de personas que hacía su vida en estas ha pasado de 2.760.138 personas en 2012 a 2.520.651 en 2018, según los datos del Instituto Nacional de Estadística. Una sangría que es especialmente acusada en territorios como la llamada Serranía Celtibérica —con el doble del tamaño de Bélgica, y 7,72 hab./km2, menos que la Laponia ártica— pero del que no se libran otras zonas como Asturias, Galicia o Jaén.
Teruel y Soria, las provincias más despobladas de Europa, siempre fueron zona cero de un fenómeno global del que España no solo no se libra, sino en el que pega con más fuerza que en otras regiones. Quizá por ello sus plataformas Teruel Existe y Soria ¡Ya!, con dos décadas de activismo, han liderado la resistencia contras los procesos de despoblación, un movimiento que este domingo 31 quieren llevar al centro de la mayor megaurbe española, Madrid, a más de 100.000 personas.
Muerte silenciosa
“Parece que toda la economía de este país se encuentra centrada en el desarrollo de megaciudades —señala a El Salto Paco Juárez, portavoz de Teruel Existe—, se están cargando extensas zonas del territorio, lenta y silenciosamente”. Frente a este proceso, las plataformas convocantes, cerca de 80 entidades entre las que se encuentran Viriatos de Zamora, La Otra Guadalajara, Jaén Merece Más, Comarca de Guadix por el Tren o Cáceres se mueve, exigen “medidas efectivas y urgentes contra la despoblación y políticas que generen de una vez cohesión y vertebración en el país”, como señalaban en un comunicado conjunto en febrero.
El portavoz de Teruel Existe explica que en la protesta que se vivirá en Madrid concurren dos sensibilidades: “La de las zonas despobladas que llevan años despoblándose y que han aportado su mayor beneficio, su gente joven, para el desarrollo de otras zonas, y la de las que a día de hoy no están sufriendo el problema tan sumamente grave de la despoblación pero que van camino de esa situación”. Juárez habla de una “segunda oleada” de vaciado de población que se está produciendo actualmente y que no afecta ya solo a localidades en peligro de extinción, sino también a las pequeñas capitales, a la que hay que sumar la llamada despoblación interior, de las poblaciones más diminutas a los núcleos más grandes.
“Contamos con los bienes ambientales y sociales de los que tanto gusta disfrutar y explotar en todo tipo de actividades sociales y económicas pero que, a cambio, solo nos retornan ese uso con expresiones como que no somos rentables económicamente, qué paradoja ¿verdad? ”, denunciaban este martes desde otra de las organizaciones que acudirán el domingo a Madrid, Ávila Resixte. “Ese mantra no es cierto”, denuncia Juárez, “sino que al territorio rural no se le están dando oportunidades, las industrias no tienen por qué estar en las grandes ciudades, por ejemplo”, apunta, remarcando que “hacen falta medidas políticas que faciliten esa redistribución que potenciarían un mayor reparto de la población”.
El AVE no para aquí
Uno de los ejes en el que concurren las organizaciones que trabajan el problema del despoblamiento es el de las infraestructuras. De las ocho decenas de organizaciones convocantes, once son plataformas en defensa del ferrocarril convencional. No es raro en un país que ha gastado desde 2014 cinco veces más —más de 15.000 millones de euros— en mejorar y ampliar la red de Alta Velocidad frente al tren convencional, a pesar de que solo el 4%de los usuarios de tren usan el AVE.
Es un modelo que ve cómo las líneas convencionales van cerrando a medida que abren las de una alta velocidad que conecta grandes urbes y desconecta todo lo que hay en medio: el llamado “efecto túnel”. Mientras, infraestructuras como la Vía de la Playa o el ferrocarril de Almanzora, la conexión de Andalucía con Murcia y la costa de la Comunitat Valenciana, que organizaciones como la Asociación Amigos del Ferrocarril Comarca de Baza y la Plataforma Comarca de Guadix por el Tren llevan años reclamando, siguen aparcadas.
Precisamente, estas dos organizaciones granadinas forman parte de las convocantes y llaman a la movilización contra “la marginación y el ninguneo que están sufriendo las comarcas del norte granadino y almeriense por parte de las distintas administraciones públicas”. Algo, remarcan, “especialmente sangrante el caso del tren, dado que a pesar de los numerosos informes de distinta índole que aconsejan la reapertura de la línea férrea Guadix-Baza-Almanzora-Lorca y de existir incluso una partida en los Presupuestos Generales del Estado para su Estudio Informativo, el Gobierno ni siquiera se ha dignado a iniciar la licitación y adjudicación del mismo, prolongando una injusta situación de aislamiento que lleva más de 34 años”.
Una situación similar ocurre con las autovías. Tal como denuncia Juárez, “se siguen potenciando los mismos ejes, en lugar de hacer un mallado que potenciaría la creación de poblaciones intermedias que asentarían los pequeños pueblos, ya que les dotarían los servicios que no tienen”. Habla de vertebrar el territorio impulsando ejes de comunicación como el Cuenca-Teruel, ya sea por tren o por carretera, para que “ todos los españoles tengan las mismas oportunidades de desarrollo, y que los servicios públicos sean los mismos en el medio urbano y en el rural, en zonas muy pobladas y en las que tienen menores densidades poblacional”, según señalan las organizaciones en un comunicado conjunto.
Son problemas a los que no solo el Gobierno, también la Unión Europea, hace oídos sordos, según denuncian las organizaciones convocantes. “La despoblación es un problema que tienen registrado desde 1993”, apunta Juárez en referenecia al Informe Moretti de regiones de baja densidad de población; “ya en 2001 llevamos a la Comisión de Peticiones y, a día de hoy, siguen sin tomárselo en serio, algo que ponen en evidencia estudios como el de Serranía Celtibérica, que ha destapado la Laponia del Sur”.
Distribución justa
Entre las cinco grandes peticiones de los convocantes, tras la “cohesión social y territorial” y el “desarrollo para todos”, se encuentra la exigencia de que los fondos europeos sean finalistas y lleguen a las provincias. También el cambio de los criterios para la distribución de los fondos europeos. “Su distribución se realiza mediante un concepto estadístico que es el Producto Interior Bruto (PIB) por habitante. Pero si nos fiamos de este, una zona que, teniendo el mismo PIB, pierda habitantes a efectos estadísticos es más rica cuando en realidad se está empobreciendo”, denuncia Juárez. Además, la medición del PIB por habitante en España se hace a nivel regional, mientras que desde Teruel Existe y Soria ¡Ya! Reclaman que se haga mediante unidades más pequeñas, como la comarca o el municipio, para detectar hacia dónde hay que designar esos fondos.
La modificación de los criterios fiscales es otro de los ejes que centran las reivindicaciones de los convocantes. “No tiene sentido que en pequeñas poblaciones de Teruel cierren comercios que pagan los mismos impuestos que en centro de Madrid. Los potenciales clientes no son los mismos”, remarca Juárez,. “Y además hacen un servicio social, al hacer que no tengas que recorrer 30 km para comprar una barra de pan”.
Pero no solo la distancia para conseguir comprar los alimentos necesarios para vivir es grande. Dotaciones de sanidad o seguridad están a menudo a más de 50 y 75 kilómetros. “Los cuarteles de las zonas rurales están cerrando, con lo que está habiendo muchos robos”, cuenta el portavoz. “Y luego, en servicios sanitarios, los pediatras no llegan a los centros de salud rurales, por no hablar del cierre de especialidades”.
También internet es clave en un mundo cada día más global. “Pedimos comunicaciones del siglo XXI”, añade Juárez, “una medida que el Gobierno podría adoptar ya es subir el servicio universal a 30 mb y que las operadoras estén obligadas”.
Estrategia nacional
En definitiva, la ‘Revuelta de la España vaciada’ pide una ‘Estrategia nacional frente al reto demográfico’, que podría estar centrada en retomar y desarrollar la Ley para el Desarrollo Sostenible del Medio Rural, de 2007. “Existe una normativa, aunque no se ha llevado a la práctica. La propuesta de Estrategia frente al reto demográfico que llevamos todavía no se ha presentado, pero lo que queremos es que haya un plan a ejecutar y que, además, sea consensuado por todos los partidos políticos”.
Y hablando de formaciones políticas, ante el aluvión de políticos profesionales que han anunciado su asistencia —el último en subirse al carro ha sido Albert Rivera, que así lo anunció este martes—, una cosa remarcan desde la organización: “Tenemos muy claro que es una movilización ciudadana. Evidentemente no podemos prohibir a los políticos que acudan, como ciudadanos, pero no es una manifestación de partido políticos, que quede muy claro”, señala Juárez. “Precisamente queremos que los partidos recojan estas demandas y sentires”.